Personas que piensan en ti

Que los familiares más allegados tengan en cuenta que tu hijo es celiaco, es normal, y te acostumbras en seguida al igual que ellos con mayor o menor dificultad, pero es algo que das por hecho. Que cuando los domingos vas a comer a casa de los abuelos le tienen su pan, cocinan para todos igual (sin gluten), y alguna chuche o Bollito de postre siempre cae, lacasitos o chocolate están también a la orden del día.  Lo que es más difícil por no decir casi imposible es cuando sales del entorno familiar, ahí nadie se preocupa porque el problema lo tienes tu y ayá te las apañes, en el colegio, el parque, los amigos, por más que te explicas casi nadie se entera mucho y siempre hay que estar pendiente de lo que le ofrecen pues es habitual que con las mejores intenciones les tienten con bocadillos, galletas o bollos que contienen gluten. El motivo de este post que nada tiene que ver con una receta fácil y deliciaca es que desde que mi hijo empezó el colé en septiembre he conocido a una persona que desde el primer día se ha molestado en conocer la enfermedad, en que alimentos puede tomar y que no, y siempre que lleva la merienda para sus hijos lleva cosas que pueda tomar también el mío, eso es algo que nunca podré agradecer lo suficiente, pues siempre le ha tratado como uno más, con un cariño y una dulzura que me emocionan.

Hoy para rematar le ha dejado a mi hijo en su perchita una bolsita de sorpresa pars cuando saliese por la tarde que lo viese.(yo pensé que sería una chorradilla de Spiderman, que es la moda) pero cuando he visto que era una caja de galletas sin gluten, me he emocionado, y él no digamos, se las ha comido todas en una tarde! Esos son los detalles que sólo puede tener una persona que nos quiere de verdad y que esta concienciada con la causa. Gracias de corazón por todos los pequeños detalles que tienes con todos nosotros.
Este post va por ti!

(En el próximo bizcocho de calabaza)